Eficiencia Energética
6 junio, 2017Sin lugar a dudas, mucho se ha escrito sobre el bioclimatismo….. Pero este es ciertamente, el gran olvidado en la arquitectura actual.
Sin embargo, se habla de bioclimatismo y parece que se está hablando de magia, parece claro que la mayoría de la población no cree en esto…. ni si quiera los arquitectos en su mayoría.
De repente, hemos olvidado que durante siglos, la arquitectura seguía parámetros bioclimaticos, no hay más que ver cualquier edificación en medio rural, las conocidas casas de campo, en sus diversas variedades (Barraca, Riu-Rau, Masía, Alquerias, etc…) seguían unos parámetros en su construcción, que sin ser los ideales, por otros motivos, eran sin duda en su mayoría, mejores a los de muchas viviendas actuales. La actual arquitectura no es más que una moda, como si de un vestido se tratase, a las órdenes de tendencias, sin importar si estas modas dan como resultado, construcciones fuera de toda lógica, viviendas inhabitables, con un caparazón estético pero con un interior ínfimo en calidad de vida…
No podemos construir viviendas que son simplemente Fallas Valencianas, el cliente no está demandando una estatua o un cuadro, está solicitando una vivienda y esta es una palabra muy expresiva, vivienda… Según la Real Academia Española, (Del lat. vivenda, t. f. de -dus, part. fut. pas. de vivĕre, vivir). 1. f. Lugar cerrado y cubierto construido para ser habitado por personas. 2. f. desus. Género de vida o modo de vivir. Por tanto, construyamos y diseñemos entornos donde vivir sea simplemente fácil y confortable y pueda ser habitado por personas.
Basta ya de crear invernaderos con una definición volumétrica externa, al compas de tendencias propias de “fashion week”, dejemos las modas para otros sectores y ofrezcamos a la gente un lugar donde vivir, donde la calidad de vida este por delante de la moda arquitectónica del momento.
¿Hay que renunciar al factor estético y diseño vanguardista? Por supuesto que no, simplemente hay que estudiar mejor los resultados del diseño, hay que encontrar el equilibrio entre vanguardia y calidad. Debemos aprovechar todas las ventajas climáticas en nuestra casa, sol, orientación, viento, vegetación, materiales constructivos…. y una vez alcanzado esto… darle forma en un diseño propio y personalizado. No nos excusemos en la estética para sacrificar la calidad de los habitantes.